La historia de Mónica Michelizzi





Hoy, en el blog de Interlingua, hablamos con Mónica Michelizzi, abogada estadounidense de ascendencia italiana que lleva desde los trece años estudiando español. Mónica es una de nuestras estudiantes más interesantes; conozcamos su historia.
 

¿Cuándo empezaste a estudiar español y cuáles fueron tus motivaciones?
Empecé a estudiar español cuando tenía trece años porque en Estados Unidos para ir a la Universidad se necesitaba aprender un idioma. Decidí estudiar español por una razón práctica; vivía en California donde mucha gente habla español. 

En la escuela  aprendí las reglas del lenguaje pero no como se habla, además cuando era jóven solo  aprendía para  ir a la Universidad, para ser abogada  como mi padre (que era abogado). Cuando me fui a la Universidad Complutense de Madrid por un intercambio con la Universidad de Marquette en Wisconsin, el español empezó a gustarme de verdad y fue entonces cuando lo empecé a aprender para mí.

¿Cómo fue tu experiencia en España?
Yo creía que sería difícil, pero descubrí que cuando aprendes algo y las ideas están en español desde el principio, es fácil pensar en español.
En Madrid empecé a leer Literatura e Historia de España y me empezó a resultar fascinante. Sobre todo disfruté leyendo las obras de la literatura española. Recuerdo un pasaje de  la obra Don Juan Tenorio de José Zorrilla que era  muy dulce en español. Cuando leí esta parte del libro me di cuenta que era diferente a leerlo en inglés, podía sentir los sentimientos de los personajes y creo que la razón es que el idioma permite la transmisión de sentimientos y el español es un idioma muy emocional.  

¿Seguiste practicando español a tu regreso?

No, después fui a la escuela de abogados y perdí la capacidad de hablar en español, porque cuando empecé mi carrera profesional no tenía tiempo para nada. Tampoco viajé por quince años, estaba muy centrada en mi vida profesional. 
Entonces ocurrió que dos semanas antes de cumplir 40 años fui a un concierto de Ani DiFranco y ella cantó una canción que dice  “I used to be a super hero”, y entonces me di cuenta de que en la vida hacemos muchas cosas como trabajar, y se nos olvida lo que realmente nos hace especiales; nos perdemos a nosotros mismos.
Después del concierto decidí que necesitaba recordar las cosas que me hacen especial, y eso era viajar. Yo quería volver a España porque me gusta la cultura española pero  no creí que necesitase hablar español otra vez, sino solo viajar, pero luego me di cuenta de que si no hablas el idioma de un país no puedes ser parte de la cultura. Por eso cuando volví de mi primer viaje a España me puse estudiar español otra vez.     
 
¿Qué es lo que más te gusta de la cultura?
Lo que más me gusta de la cultura es que me recuerda a mis abuelos, que son italianos. Tuve una cultura muy mediterránea y es muy similar a la de España. En Madrid me sentí como en casa, como en la casa de mis abuelos. 
 
¿Es importante para usted, que vive en Phoenix, saber español?

En mi caso no es importante para mi trabajo, es algo más personal, me gusta ser una persona que forma parte de la cultura, y cuando voy a España, o cuando estoy entre personas que hablan español, quiero ser parte de la cultura, y no puedo serlo si no puedo hablar el idioma.